CONDICIONES LABORALES DE LAS MUJERES Y LOS NIÑOS EN EL SIGLO XVIII
Las mujeres en esta época estuvieron olvidadas. En el sector textil fue donde más mujeres trabajaron. Una de las causas de la capitalización del sector fueron los bajos salarios de las mujeres y niños. Los salarios de las mujeres eran inferiores a los de los hombres, y el de un niño pequeño de entre 8 y 12 años, era la cuarta parte del salario de un hombre. El trabajo infantil fue muy importante para equilibrar la escasez económica familiar obrera. Los niños y las niñas tenían largas jornadas de 14 horas diarias, que a veces incluso llegaban a las 18 horas, y casi no recibian salarios. La asistencia a la escuela era imposible.

Había dos formas de trabajo infantil durante la revolución industrial: los aprendices de la parroquia y los que trabajaban gratis. Los aprendices de la parroquia eran niños huérfanos que estaban bajo el cuidado del gobierno británico. Los dueños de las fábricas a cambio de su trabajao le proporcionaban vivienda y alimentos, estos niños no recibían compensación monetaria. Los niños que trabajaban por salarios muy bajos ganaron el título de niños que trabajaban gratis, algunos tenían 5 años y trabajaban en fábricas y minas de carbón. Debido al crecimiento de las fábricas textiles, muchos niños trabajaron en fábricas de algodón donde pasaban mucho tiempo encerrados en una habitación con muy poco aire fresco.

La sociedad burguesa veía con buenos ojos el trabajo infantil.
La legislación protecora de la infancia fue escasa y se aplicó sin demasiado interés. Aunque las primeras legislaciones prohibicionistas datan de 1833 sólo a partir de mediados del siglo XIX se puede hablar de cierta mejora.
VÍDEO: https://youtu.be/bUWoVYfO90Q
Comentarios
Publicar un comentario